«Son los pedófilos del siglo XXI que violan los derechos humanos de los niños».

Estas fueron las palabras que el senador Guido Girardi (PPD) escogió para calificar a las empresas que según aseguró «están amenazando a la Presidenta Bachelet» con que si se aplica la nueva ley de etiquetado de alimentos –cuyo reglamento está en redacción en el Ministerio de Salud (ver recuadro)–, van a demandar al Estado ante la Organización Mundial de Comercio (OMC).

El presidente de la comisión de Salud del Senado sostuvo que Nestlé, Kellogg’s, McDonald’s y The Coca Cola Company «abusan de la credulidad de los niños» y originan enfermedades como obesidad, infarto, cáncer, hipertensión o diabetes, además de carencias nutricionales.

Señaló que hay empresas que han advertido que «si no se doblega Chile, van a demandar al país ante la OMC (…) ¡Que nos demanden a la OMC!», respondió.

Consulta pública

Las polémicas declaraciones –que generaron una dura respuesta por parte de la industria– se producen en medio de la redacción final del reglamento de la ley de etiquetado.

En octubre se terminó el proceso de consulta pública al que fue sometido ante diferentes gremios y asociaciones de consumidores, de salud, educacional (con 300 respuestas de respaldo y rechazo). Estas propuestas deberán ser consideradas por el Ministerio de Salud para iniciar la redacción final, cuya aplicación será de manera gradual y en cuatro años.

Girardi hizo estas declaraciones durante su exposición en uno de los paneles de la Segunda Conferencia Internacional sobre Nutrición (CIN2), organizada por la FAO en Roma (Italia).

Puntualización

Girardi señaló que de concretarse alguna demanda contra Chile, él pensaría en hacer «un boicot, llamando a los chilenos a no comprar más productos de los pedófilos de Nestlé, Coca Cola, McDonald’s y Kellogg’s, que están intentando impedir la aplicación soberana de nuestras leyes».

Esta mañana, el equipo del parlamentario en Santiago aclaró que «de concretarse esa intimidación (la demanda de las firmas de alimentos) llevaría adelante una ‘demanda’ contra las empresas» que sería impulsaría junto a universidades, instituciones de salud, organizaciones de consumidores y derechos humanos y parlamentarios de gobierno, descartando que esa eventual demanda sea encabezada por el gobierno de Bachelet.

La presentación del senador incluyó 112 láminas en las cuales aludió a demandas contra McDonald’s (2004), informes de falencias de los «cereales para el desayuno» de Kellog’s y Nestlé (2005), y denuncias en contra de uno de los componentes de la Coca Cola zero (2007).

La reacción pública de la industria estuvo en manos del presidente de la Asociación de Alimentos y Bebidas de Chile, Rodrigo Alvarez, quien calificó las declaraciones como «palabras de naturaleza injuriosa, injustas, absolutamente desproporcionadas, que rechazamos de forma y fondo».

«Este tipo de declaraciones, en un seminario internacional hacen un profundo daño a un proceso democrático. Es un error gigantesco que desvirtúa lo que ocurre en nuestro país».

Sin embargo, Alvarez admitió que «creemos que este es un mal reglamento, pero estamos dispuestos a perfeccionarlo y colaborar en su elaboración».

Fuente : La Segunda