Uno de los elementos que consideró la Fiscalía Nacional Económica (FNE) al solicitar un requerimiento al Tribunal de Defensa de la Libre Competencia en contra de Unilever , al que acusó de abuso de posición dominante y pidió una multa de US$ 20,4 millones, fue la relevancia que tienen las marcas de la multinacional en el mercado de los detergentes.

El documento presentado por la FNE señala que «la creación y posicionamiento de una marca juega un rol primordial en la categoría de detergentes, puesto que en general el consumidor es fiel al producto que utiliza y reacio a probar nuevas alternativas, especialmente en el canal supermercadista».

Releva el hecho de que Unilever sea propietaria de la marca de detergente OMO , que según la FNE se encuentra profundamente arraigada en el mercado y ha sido destacada por diferentes estudios como una de las marcas más importantes de los clientes.

Asimismo, indica que Unilever cuenta con otras marcas reconocidas que apuntan a distintos segmentos sociales. Es el caso de Drive y Skip que van dirigidas a sectores de mayores ingresos y Rinso, a la población de menores recursos.

«Aquello refuerza la posición de Unilever dentro del mercado de referencia y dificulta el ingreso de cualquier potencial competidor, puesto que el proveedor dominante es capaz de abastecer por sí solo todos los segmentos de la demanda», sentencia la FNE. Agrega que, de esta manera, el posicionamiento de Unilever en el mercado de los detergentes y la relevancia de sus marcas convierten a sus productos en «productos imprescindibles» (must stock items).
«Socio comercial inevitable»

Entre los argumentos de la FNE también resalta el hecho que Unilever es «un socio comercial inevitable» en todos los canales de distribución.

«No existe en el territorio nacional proveedor que posea un portafolio tan importante de productos como Unilever, que participa simultáneamente en las categorías de Home Care, Personal Care y Food», sostiene la FNE.

Añade que Unilever además de liderar en el mercado de detergentes, participa en el negocio de desodorantes con las marcas Axe y Rexona ; en jabones con Lesancy, Dove y St Ives ; en pastas dentales con Pepsodent y en shampoo con Sedal, Clear, Tresemé y Alberto V05 .

También está presente en el mercado de lavalozas con la marca Quix ; en limpiadores con Cif y Vim ; en suavizantes con Soft ; en mayonesas con JB y Hellmans ; en salsas de tomate con Malloa y Doña Clara ; en helados con Bresler y en el té con Té Club y Lipton.

Según la Fiscalía, en el canal de distribución de supermercados Unilever es el segundo proveedor más relevante detrás de Nestlé, «gozando así de una posición clave respecto de los consumidores y canales de distribución».

«Es así que en cualquier negociación, Unilever tiene la capacidad de hacer valer su portafolio, lo que confiere a sus decisiones comerciales una particular importancia en relación a clientes y distribuidores», señaló.

Desde Unilever señalaron que aún no ha sido notificada respecto de algún requerimiento de la FNE y que, por lo tanto, no está en condiciones de emitir algún comentario por el momento.

Fuente : La Segunda